terça-feira, 24 de maio de 2022

Gourmet, inutilidad en la humanidad

Roberto da Silva Rocha, profesor universitario y politólogo
Gourmet, inutilidad en la humanidad
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¿Hay un estándar para el gusto?

¿Cómo podría ser posible conocer exactamente el mismo sabor que otro está experimentando?

¿Cómo sería el mecanismo para poder describir las impresiones de sabor para que otra persona pueda reproducir exactamente la misma sensación de sabor en tu boca?

¿Cómo sería posible medir el gusto y el gusto en una escala de medición numéricamente?

Como ninguna de estas preguntas puede ser respondida científicamente según el positivismo iniciado por Comte, entonces sería una discusión inútil solo soslayada por una investigación cuantitativa sobre el promedio de las respuestas de una muestra de catadores, pero aun así, el gusto medio o la desviación estándar es nada, satisfaría el gusto de todos, ni siquiera de una persona al azar, basta que uno de ellos no esté de acuerdo y este paladar es mío, entonces, las seis estrellas de la excelencia del sabor no satisfarán mis papilas gustativas.

Cada uno tiene su gusto, esto vale para todo sin excepción, desde: música, pintura, dibujo, cine, videos, fotografías, libros, profesión, ocio, aficiones, lugares, países, política, ideología, religión, sexo, gusto, bebidas , la comida, no se puede imponer nada, aunque sea la mayoría absoluta, porque si no satisface a una persona, no será la media ni la mediana ni la crítica especializada, ni el conocimiento y estatus del catador los que impondrán el otro gusto nuevo sobre una persona, una etnia, una cultura, un país o una familia.

Mientras esto exista, seguiremos viendo el desfile de pseudo conocedores de: vino, whiskies, champagne, pan, carnes, parrillada, pasta, pimientos, dulces, hasta agua, pero si estos conocedores de sabores sofisticados sobre la mejor cerveza y el mejor queso no me gusta ni me agrada, nada se puede decir de mi capacidad de afinar el gusto, porque no existe una escala numérica que pueda comparar las experiencias gustativas superiores o inferiores de una persona, porque eliminaría toda posibilidad de variedad de sabores, gustos, colores, preferencias, sonidos, deseos y que en sí mismo empobrecerían terriblemente a la cultura humana.

Roberto da Silva Rocha, professor universitário e cientista político

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