sin polvo de arroz
Rehabilitación del palacio de muñecas y asistentes de salón de belleza femenino, para un taller de CEO masculino. Pero no le quedó alternativa, el rey Carlos III tuvo que sacar todos los espejos, las cajas de polvo de arroz, los receptores absorbentes escondidos en los rincones durante el reinado de la ex reina Isabel I, los perfumes de mujer, las piezas de sushi y sashimi, muchos cajones de bragas, varios cajas de peines y cepillos, calcetines de encaje, cajas de horquillas, bañeras llenas de flores en las paredes, diseños de mariposas en las paredes, mucho perfume por la casa, cortinas rosas, alfombras rosas, platería llena de perlas y lazos, manteles llenos de flores y mariposas, pájaros, finalmente transformando la casa de muñecas en casa de un hombre, sin esas personas hablando en voz baja llena de sutilezas para no tomar por sorpresa a la ex reina en ropa íntima e inapropiada, es un trabajo enorme para masculinizar todos los palacios, los itinerarios de salida y llegada, el horario de actividades sin té en las tazas demasiado decoradas, cualquiera que haya visto la habitación de una chica sabe de lo que hablo.
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