Grandes ofertas
Otro domingo y los maestros malabaristas en los escenarios llamados pastores evangélicos desde los púlpitos lograron una vez más alimentar las esperanzas de los mismos comerciantes pasivos pero no tan inocentes miembros u ovejas de los pastores evangélicos.
No tan inocentes porque creen que están haciendo un gran negocio muy rentable para llegar el lunes antes que sus vecinos, amigos, familiares con apenas el diez por ciento de sus ingresos mensuales y algunas ofertas pueden aumentar exponencialmente sus posibilidades en el mundo de la incertidumbre y la manipulación. la suerte y el azar de las personas, cambiar las decisiones judiciales en la mente de los jueces, cambiar los resultados de los partidos de fútbol para que su equipo favorito salga campeón, garantizar un nuevo empleo y ascenso en el trabajo y la actividad, garantizar un auto nuevo y la casa pagada, impecable salud y riqueza, además de un ser querido apasionado en un matrimonio feliz y estable con hijos bendecidos, ¿quién no querría estar seguro de que todo esto tiene un precio muy bueno e interesante?
Así que ya no basta con culpar a pastores, sacerdotes, brujos y manipuladores de fraude sentimental, emocional y espiritual si las propias víctimas entienden que están engañando y negociando con los seres espirituales que reciben los favores sacrificiales de oraciones, un poco más de dinero y la vida está protegida de todo mal y mala suerte.
Ambos bandos se engañan y engañan porque no pasa nada y sin embargo pasan miles de años y la única esperanza de superar la imponderable posibilidad del incognoscible mundo de la suerte aún no puede ser comprendida ni manipulada porque ninguna religión ha obtenido la clave de acceso al mundo espiritual. Ni siquiera puedo gobernar las leyes del universo, pero es mejor no correr ningún riesgo... Es sólo que...
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