segunda-feira, 21 de novembro de 2022

El diez por ciento de la población mundial quiere ser paradigma y protagonista del mundo

El diez por ciento de la población mundial quiere ser paradigma y protagonista del mundo

Ese mismo diez por ciento de la población quiere dictar las normas de conducta general como en Qatar durante la breve estancia con motivo del mundial de fútbol, ​​donde las tensiones provocadas por la situación milenaria de la cultura local chocan con la norma mundial universal dictada por eurocentrismo, incluso pisoteando la máxima de la Antropología que dice respetar cada cultura, sin jerarquía de derechos inmanentes, según Hegel, los derechos naturales y universales permanentes e inmutables son el derecho a la vida y la libertad, los demás derechos son relativos, contingentes, necesarios pero no indiscutibles y relativizado.

Cualquier nueva forma de derechos necesita ser acordada por la población y la comunidad local legalmente establecida como derechos supervinientes tales como el derecho a la propia religión fuera de un sistema teocéntrico, o el derecho al propio sistema de gobierno y su sistema político, el derecho de familia donde se establece la monogamia o la poligamia, el derecho al uso de los bienes de mérito colectivo, los bienes de usufructo común tales como los pasos por ríos y lagos, la división de deberes de impuestos y tasas, el sistema de elección de políticos y la constitución, son derechos accesorios y privados construidos y constituidos por mayoría común simple o cualificada.

Todo lo demás debe ser respetado dentro de la jurisdicción y competencia legal de cada región y situación, y los conflictos y desacuerdos deben resolverse pacíficamente ya través de las normas morales escritas y no escritas de la comunidad. El resto es laceración de la minoría activista que sólo busca apropiarse de la hegemonía para imponer su particular y minoritaria visión del mundo, precisamente cuando sólo el diez por ciento de la población de la tierra que vive en Europa y América quiere imponerse al 90% de la población mundial que vive entre India, China, Indonesia, Asia, Medio Oriente, África y que consume solo el 10% de toda la energía producida en el mundo, y solo el 10% de toda la cocaína y las drogas y bebidas alcohólicas de toda la humanidad no tiene moral para imponer normas éticas a la humanidad en su conjunto.


Roberto da Silva Rocha, professor universitário e cientista político

Nenhum comentário: