quinta-feira, 22 de dezembro de 2022

Sentencias de policracias

Sentencias de policracias

Muchos aún no se dan cuenta de la poliarquía de juicios abundantes desde que la humanidad construyó su sistema de leyes y constituyó el llamado Estado de Derecho de modo que, según la teoría contractualista de Jean Jackques Rousseau y sus seguidores, como Hegel, Thomas Hobbes, Locke estipuló una hipótesis ahistórica, pero sumamente plausible, de que en un determinado momento de la línea de tiempo los seres humanos formalizaron un conjunto de leyes que sumaron a la ley natural defendida oralmente y por la tradición que sólo pretendía garantizar tres derechos únicos: el derecho a la vida sí mismo; derecho a la libertad de movimiento; derecho a la supervivencia.

Para constituir este cuerpo de derechos, primero estableció algunos requisitos esenciales, tales como: la facultad de reconocer derechos frente a una demanda entre dos litigios; el lenguaje común; el territorio de jurisdicción; obediencia a la autoridad de la ley.

Establecidos estos requisitos previos, el registro escrito acompañó entonces a la invención de la escritura y su soporte, que serían las tablillas de arcilla, el papiro o el pergamino.

Saber leer y escribir fue hasta la época moderna una iniciación secreta de unos pocos privilegiados, los escribas y servidores burocráticos, embajadores, que eran los guardianes del saber de la comunidad y la civilización.

Entonces, la personificación de la ley era la ley misma, la cual era mencionada por los líderes tradicionales, los ancianos, los sacerdotes, posteriormente se crea la figura y función de los jueces para ser los encargados de guardar las leyes y sentenciar a los querellantes judiciales. .

Un largo pasado esconde el origen y la forma de establecer lo legal; en un principio, la tradición y la religión sembraron los primeros principios de las normas no escritas; los cambios tuvieron como fuente nuevas ideas sobre leyes traídas por otras culturas que se mezclaron traídas por foráneos y extranjeros.

Los cambios eran lentos y necesitaban ser absorbidos por pesadas tradiciones, y necesitaban ser introducidos en las conciencias de las personas para que prestaran atención y los aceptaran como justos; en algún momento los sacerdotes se apropiaron del control exclusivo y de la fuente del derecho; las infracciones de los principios legales se trataban con penas como la mutilación física, el encarcelamiento y la ejecución por la pena de muerte o la tortura.

El largo camino desde los consejos tribales, desde el pajé, hasta el sheriff del salvaje oeste, desde los tribunales de la inquisición, los edictos imperiales, hasta los contratos civiles, los convenios internacionales, los tratados como Methuem, Tordesillas, los cabildos y condominios, los registros civiles, finalmente acordamos instalar los juzgados civiles de justicia, y en paralelo, pequeños juzgados informales, como la comisaría, las sesiones de condominio, los dominios de empresas que sancionan a empleados, funcionarios, integrantes de instituciones, estudiantes de escuelas todo bajo la juicio y sentencia de los directores, presidentes, coordinadores, jefes, los juicios se han multiplicado de tal manera de diversidades de juicios, que un ejecutivo de una gran empresa necesita tomar cientos de decisiones en un solo día, son juicios sobre cosas, personas y activos.

No sería diferente romper la tradición de los juicios en la nueva sociedad digital de la burbuja de internet; pronto aparecieron los censores, factchecks que nos disciplinan para acceder y usar cualquier servicio en las redes sociales, debemos seguir el código de adhesión, y los castigos los aplican jueces invisibles que ni sabemos donde están, censurando nuestros textos, imágenes, canciones, respuestas, cada post necesita ser aceptado y juzgado por los celosos y no siempre acreditados jueces de estas nuevas instancias de tribunales digitales que han sumado a nuestro elenco infinito de inspectores de conducta social una categoría más de invisibles y no siempre honestos, jueces justos, imparciales y limpios.


Roberto da Silva Rocha, professor universitário e cientista político

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